¿Qué son las viviendas colaborativas, o el cohousing, para mayores?
Cuando nos planteamos cómo explicar que son las viviendas colaborativas, en seguida pensamos en hacer un video que en unos pocos minutos lo haga por nosotros, pero ya hay uno de una comunidad canadiense que, aunque lo hace en inglés, lo explica, a modo de introducción al tema, muy bien.
Como habréis podido ver, el video comienza explicando qué es una casa, describiéndola como el lugar donde vive la narradora con su familia, que cuidan y limpian, lo cual les ocupa mucho tiempo, y del que usan mucho algunas estancias, y menos otras. Y cuando quieren ver a otras personas se trasladan en coche a otras casas, y de vez en cuando invitan a amigos y a alguno de los pocos vecinos que conocen, a visitarles en su casa.
Pero nuestra protagonista y su familia se plantean que puede haber una manera mejor de vivir, por lo que deciden pensar de forma diferente, y unirse a una comunidad de cohousing.
¿Qué es el cohousing o viviendas colaborativas?
Es ahora cuando definen qué es el cohousing, ésto es un lugar en el que entre todos, decidan cómo quieren que sean las casas, en el que las zonas que menos se usen sean compartidas, en la que haya una gran zona común donde relacionarse y pasar gran parte del tiempo, donde cocinar y comer juntos, donde pueda haber una zona para invitados, bonitos jardines que cuidar. Al fin y al cabo, donde las relaciones sean más factibles y fluidas para todos, y siempre haya alguien cerca con quien compartir y pasar un buen rato.
Además, algunos aspectos de las viviendas pueden ser más respetuosos con el medio ambiente y eficientes, y todo ello decidirlo y ponerlo en marcha entre todos, con la colaboración de todos los miembros de la comunidad, creando de esta forma un entorno de cooperación y relaciones positivas. Esto es el cohousing.
Por supuesto estas comunidades pueden ser de muchos tipos. Pueden ser intergeneracionales o de gente mayor, puede ser de maestros o de jugadores de baloncesto, o pueden, simplemente, estar abiertas a cualquier persona que quiera una vida más social, donde su puesta en marcha y funcionamiento sean participativos y democráticos en un sentido amplio, y donde todo este pensado por y para las personas que van a vivir allí.
Beneficios de las viviendas colaborativas
Si esto parece una gran idea a simple vista para cualquier persona, lo es especialmente para los mayores en una sociedad donde problemas como la soledad y los cuidados, la hacen si cabe, más necesarios. Este tipos de viviendas promueven la vida independiente, el mantenimiento de la posición económica, la participación social y el envejecimiento activo, en alojamientos apropiados y autónomos con instalaciones comunes, donde los usuarios tienen la oportunidad de compartir las actividades diarias y ayudarse mutuamente.
Éste tipo de proyectos son muy novedosos en nuestro país, y apenas existen unos pocos casos funcionando, pero en el norte de Europa y en los Estados Unidos cuentan ya con una larga tradición. Su origen está en Dinamarca, desde donde se llevó a los Estados Unidos a raíz del trabajo del arquitecto Charles Durrett y de la publicación del libro «The Senior Cohousing Handbook».
Se trata, según lo define el arquitecto español Heitor García Lantaron, de «un tipo de vivienda que aúna un modelo social de gestión con un modelo arquitectónico de alojamiento», sin ser una simple vivienda colectiva, ni una comuna. Este tipo de alojamiento se compone de un espacio doméstico privado -la vivienda- gestionado de forma personalizada, y de una serie de espacios comunes públicos gestionados de forma colectiva y participativa. Los servicios existentes también se gestionan y organizan de forma colectiva y participativa.
Según el Proyecto MOVICOMA, un «Estudio del movimiento de vivienda colaborativa de personas mayores en España», las razones de las viviendas colaborativas son: envejecer con autonomía, disponer de servicios y vivienda adecuada, vida en comunidad y transformación social, afirmando: «¿Movimiento social? Evidentemente, es un movimiento social. Es un movimiento sectorial. Es un movimiento sectorial porque mueve a los sectores que están implicados en esto, lo que es la asistencia, la construcción, los mismos profesionales, ¿eh?, la universidad, pondríamos aquí, mueve a todo esto, con lo cual es un movimiento que va generando otros movimientos a su vez».
El cohousing en España
En nuestro país, el primer caso de viviendas colaborativas para mayores se dio en Malaga donde en el año 2000 se terminó de construir el Residencial Santa Clara. Un caso más reciente que ha tenido bastante eco en prensa y medios es Trabensol, en la provincia de Madrid. Otros ejemplos son Convivir en Cuenca, la cooperativa Profuturo en Valladolid, y todavía en creación Brisas del Cantábrico, cerca de Santander.
Centro Social de Convivencia, Asistencia y Servicios para mayores Trabensol